El diputado nacional Ricardo López Murphy le reclamó a la administración de Javier Milei liberar las restricciones cambiarias tras la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal y pidió "abandonar la superficialidad".
Durante una entrevista con radio Rivadavia, el parlamentario se refirió a los temores que hay en Casa Rosada ante el levantamiento del cepo y la posibilidad de una corrida cambiaria. “Esa idea de que la Argentina es diferente que los demás países y que requiere una economía argentina, una botánica argentina, una zoología argentina, a mí siempre me pareció absurda. Si Uruguay, Paraguay, Brasil, Chile, Perú, Colombia, México, todos los países centroamericanos, los países desarrollados, no tienen cepo, ¿por qué no podemos funcionar sin cepo? ¿Por qué tenemos que funcionar como Corea del Norte, Venezuela o como Cuba? El cepo es altamente irrazonable”, planteó.
Ley Bases: el oficialismo cuenta votos y se acerca a su triunfo parlamentario“Lo que tiene que hacer es dar pasos muy claros sobre cómo va a desarmar un sistema que es patológico, enfermo; que es el corazón de la idea kirchnerista. ¿O usted no notó que en noviembre el país votó en contra de seguir por el mismo camino que veníamos?”, agregó.
Bajo las premisas de que ya pasaron siete meses de gestión libertaria y de que aún hay 3.000 millones de dólares negativos de reservas, el economista indicó que de esa situación “se sale seguro” si las exportaciones y las importaciones se liquidan al mismo tipo de cambio. Y para desterrar las ideas de una posible corrida, que priman en el Gobierno para continuar con las restricciones, puso un ejemplo.
“Cuando Alejandro Végh Villegas, famoso ministro de Hacienda de Uruguay, liberó en el año 74, en una situación desesperante para ese país porque se había multiplicado por cuatro la cuenta petrolera, todo el mundo decía: ‘Dios sabe lo que va a pasar’. Y no pasó nada. Los mercados se fueron normalizando”, comparó.
Convencido de que el Ejecutivo tiene que dejar atrás “la artificialidad”, el diputado de Hacemos Coalición Federal -con el que Milei está distanciado pese a compartir una ideología económica liberal- dijo que la salida del cepo tiene que estar acompañada por una modificación del régimen previsional -porque según planteó no se puede aportar 30 años para estar jubilado 35- y por la continuación del achicamiento del Estado.
Además, recomendó un acuerdo con los municipios y las provincias para que no aumenten impuestos de manera “disparatada”. “Usted está pagando un alto precio por la incertidumbre, porque no sabe el régimen monetario cambiario. ¿Iría a invertir en un lugar donde no se sabe el régimen monetario-cambiario? ¿Conoce a alguien que haga eso? ¿Conoce a alguien que vaya a vender los dólares a un precio que es dos tercios del valor del dólar del mercado?”, preguntó.
López Murphy comentó también que el último informe del FMI sobre la situación argentina, según su lectura, le dice al Gobierno que se parezca al régimen de Perú o de Uruguay. “A mí me parece una cuestión lógica que no seamos el prototipo de otro diseño aventurado, yo diría que ese va a ser el gran desafío. Ese sistema de Perú, de Uruguay, no resiste el cepo”, insistió, seguro de que la Argentina debe dirigirse a un “superávit fiscal sistemático”, como propuso Valdés.
El director del Departamento del Hemisferio Occidental del organismo está apuntado por el Gobierno, que requirió que lo corran de las negociaciones sobre el programa local. El propio Milei -sin nombrarlo- fue quien deslizó que Valdés fue laxo con los incumplimientos del gobierno anterior y le achacó “vínculos con el Foro de San Pablo”, es decir, con sectores de la izquierda.
“Rodrigo Valdés es un economista chileno que asesoraba al presidente [Ricardo] Lagos, después fue funcionario del Fondo, fue ministro de Chile, ahora es el director del Departamento del Hemisferio Occidental; lo deberíamos tratar con cierto cuidado”, advirtió López Murphy. “Rodrigo Valdés es uno de los economistas más destacados de América Latina, de alta profesionalidad y alta calidad intelectual; y el informe que hizo el FMI sobre la Argentina probablemente sea el mejor informe que escribieron en muchos años”, enfatizó.
Al respecto, el diputado nacional también acotó: “Me parece un informe realista que dice que no se puede seguir con el régimen -del cepo- que nos habíamos comprometido a no extender más allá del 30 de junio. Tenemos que tener una congruencia. Yo me niego a considerar el control de cambio porque me parece disparatado y fue disparatado cuando lo pusimos. ¿Cuándo tuvimos control de cambio? En una emergencia, por ejemplo, en la Primera Guerra Mundial o en la gran recesión de los años 30″.